8 ene 2023

Otra historia de abogados

Infiltrado

Tras sangrientas jornadas de confrontación, los atacantes tomaron una resolución: sitiarían la ciudad. Era consenso general que pronto se rendirían. Meses después, un grupo de abogados de la ciudad rodeada, comenzó a mediar en el conflicto. Pasado un año, los asediados parecían alimentarse del aire y los abogados redactaban alternativas tan infructuosas como los intentos de romper la muralla. Finalmente, Leodardo Da Bici, un inventor llegado misteriosamente de tierras lejanas, entregó al ejército atacante los planos de una costosa catapulta capaz de convencer a los abogados de aceptar una rendición inmediata. Sin embargo, el gobierno de la ciudad decidió resistir mientras se construía el artefacto, con gran menoscabo de las finanzas de los atacantes. Finalmente, el invento resultó ser un ruinoso engaño y los abogados, con Leonardo de Victoria a la cabeza pues ese era su verdadero nombre, brindaron en la torre del homenaje viendo retirarse al ejército invasor.

©Mikel Aboitiz

2 comentarios:

  1. Inventos tardíos o a destiempo, ya lo creo.

    Un abrazo

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    Respuestas
    1. Gracias por pasarte de nuevo por aquí.
      Un abrazo

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